La lluvia,
esa que cae sobre mi ventana,
se agolpa en mi interior
congelándome el alma.
La lluvia,
esa que se confunde en mi piel,
llora tu ausencia
llenándome de hiel.
La lluvia,
esa que se oye tras el cristal,
son las tristes lágrimas
que rozan mi faz.
La lluvia,
esa que no deja salir el sol,
aumenta mi desesperanza
por tu inalcanzable amor.
© Patricia R.A.
3 voces silenciosas:
Un poema tan bonito, bien merece un rayito de Sol.
un abrazo
jose
Coge el paraguas y no dejes que la lluvia te cale :)
Otro precioso.
Un Besito!
Dolor, mucho dolor. ¿Sufres así de intenso ahora? Espero que no.
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